Las
terapias
complementarias
se
caracterizan
por
que
consideran
a
la
persona
como
un
todo
(enfoque
holístico),
en
continua
interacción
y
cambio
con
el
entorno,
integrando
aspectos
físicos,
espirituales,
mentales,
emocionales,
genéticos,
medioambientales
y
sociales,
aunque
el
enfoque
biopsicosocial
también
es
clave
en
la
atención
sanitaria.
Las
terapias complementarias también son conocidas como:
- Medicinas/terapias alternativas
- Medicinas/terapias naturales
- Medicinas/terapias no convencionales
- Medicina tradicional
El
documento
publicado
el
19
de
Diciembre
de
2011
por
El
Ministerio
de
Sanidad,
Política
Social
e
Igualdad
recoge
los
aspectos
relativos
a
la
evidencia
científica
disponible
sobre
la
situación
de
estas
terapias,
tanto
en
España
(centros,
profesionales
y
técnicas)
como
en
el
extranjero
y
es
una
base
muy
importante
y
un
primer
paso
para
avanzar
en
una
posible
regulación
de
estas
terapias
y
distinguir
entre
aquellas
que
realmente
pueden
aportar
ventajas
a
sus
usuarios
y
las
que
no.
Desde
hace
mucho
tiempo,
la
medicina
tradicional
se
ha
utilizado
para
mantener
la
salud,
prevenir
y
tratar
enfermedades,
en
particular
enfermedades
crónicas.
En
relación
a
la
evidencia
científica
disponible
sobre
estas
terapias,
podríamos
afirmar
que
todavía
es
muy
escaso
el
número
de
estudios
publicados
de
suficiente
calidad
que
proporcionen
alto
grado
de
evidencia
sobre
su
efectividad
en
situaciones
clínicas
concretas
mediante
la
aplicación
de
métodos
científicos.
Sin
embargo,
esta
ausencia
de
demostración
de
su
eficacia
no
debe
ser
considerada
siempre
como
sinónimo
de
ineficacia
ya
que
muchos
pacientes
refieren
cierto
grado
de
satisfacción
asociado
a
una
percepción
de
mejoría
de
los
síntomas,
en
su
bienestar
o
en
la
calidad
de
vida,
aunque
en
muchas
ocasiones
no
se
dispone
de
estudios
que
permitan
determinar
si
esta
mejoría
es
debida
al
efecto
específico
causado
por
el
tratamiento
administrado
o
a
un
efecto
placebo.
Algunas
de las terapias en las que más se ha trabajado en la búsqueda de
evidencia científica son:
- Acupuntura: Es una intervención de uso muy extendido y aceptado para el tratamiento de diversas patologías, muchas de las cuales están asociadas al dolor. En cuanto a su seguridad los estudios realizados demuestran que es un tratamiento relativamente seguro y con consecuencias adversas reducidas.
- Homeopatía: Es una técnica que ha empezado a ser evaluada con criterios de medicina basada en la evidencia en los últimos años, por lo que se puede afirmar que su evaluación científica está en sus inicios. Los medicamentos homeopáticos utilizados bajo la supervisión de profesionales se consideran seguros.
- Terapias físicas y manuales: La manipulación espinal osteopática puede ser beneficiosa en pacientes con dolor lumbar, se considera una terapia manual de bajo riesgo.
Las
terapias complementrias han
centrado
la
evidencia
de
su
utilidad
en
la
tradición
y
la
experiencia
individual
y
colectiva
de
su
uso. Algunos
estudios
han
revelado
que
las
personas
recurren
a
la
Medicina
Tradicional
Complementaria,
por
diversos
motivos,
tales
como
una
mayor
demanda
de
todos
los
servicios
de
salud,
un
deseo
de
obtener
más
información
para
aumentar
los
conocimientos
sobre
las
opciones
disponibles,
una
creciente
insatisfacción
con
los
servicios
de
atención
de
salud
existentes,
y
un
renovado
interés
por
la
“atención
integral
de
la
persona”
y
la
prevención
de
enfermedades,
aspectos
frecuentemente
asociados
a
este
tipo
de
terapias.
Además,
reconocen
la
necesidad
de
hacer
hincapié́
en
la
calidad
de
vida
cuando
la
curación
no
es
posible.
En
general,
un
aspecto
positivo
de
muchas
de
estas
terapias
naturales
es
el
alto
grado
de
satisfacción
manifestado
por
sus
usuarios.
